Comunicado en solidaridad con Susana Caceres detenida en Valparaiso, $hile

Comunicado:

El día 21 de mayo de 2012 en Chile, hubo movilizaciones en Valparaíso en contra del discurso anual del presidente, donde participó mas que 8 000 personas, espacio donde el gobierno desde su hipocresía habla de sus supuestos logros y de las cosas que harán en el futuro, acción que es una burla para quienes sabemos que no son más que mentiras que utiliza el Estado para manipularnos. Se convocó una marcha en paralelo al discurso en el congreso, dónde se encontraron distintas agrupaciones, colectivos e individualidades, cada una se expresó con sus diferentes medios en el centro de Valparaíso partiendo de la Plaza Victoria.

Entre tanto, la marcha intentó acercarse al congreso siendo reprimida por las fuerzas policiales que no dejaban pasar, los ánimos comenzaron a agitarse, la rabia colectiva y el descontento se expresaron en las calles con barricadas, rayados, piedras y bombas molotovs a la policía y a la propiedad privada como bancos, transnacionales, servicios públicos que son símbolos del sistema que nos oprime. El conflicto se agudizó, las fuerzas represoras en un absurdo y desproporcionado despliegue, reprimen en contra de lxs manifestantes, con lacrimógenas, agua química, caballos, cercando las calles.

Mientras que la policía reprimía a la vez comenzaban las detenciones golpeando, arrastrando, acorralando, ejerciendo su desproporcionado poder contra la gente. Cuarenta personas fueron detenidas, entre ellas una compañera que se encontraba dentro de la protesta, fue perseguida por fuerzas especiales y posteriormente detenida, dentro de la micro uno de los uniformado le entrega a otro 2 bombas molotov las cuales son puestas dentro de su mochila. La tuvieron toda la tarde y la noche esposada, la formalizaron al día siguiente bajo la Ley Antiterrorista, con los cargos de Porte de arma incendiaria, la fiscalía pidió una condena de tres a diez años y además la prisión preventiva mientras dura la investigación, en ese momento el juzgado da la libertad, pero una semana después la Corte de Apelaciones revoca la libertad dando la orden de arresto para la prisión preventiva efectiva en la Cárcel de mujeres de Valparaíso.
Podemos ver como esta situación es otro montaje policial, al igual que muchos casos donde se repiten una y otra vez las artimañas sucias del Estado en contra quienes no siguen sus lógicas de dominación y sumisión. La violencia con que actúa la policía y sus montajes políticos son cotidianos y a la vez la respuesta se hace activa frente a esta mierda de vida impuesta dentro de este sistema que aniquila toda libertad en pos de sus intereses.

Es necesario recalcar como la prensa y medios de comunicación en casi todos los casos también son cómplices de esta maquinaria.
Últimamente en las manifestaciones y momentos de enfrentamientos en las calles se advierte una gran cantidad y presencia de todos tipos cámaras y grabaciones que supuestamente intentan captar lo ocurrido y dejar un registro histórico. Desde el ciudadano sensacionalista, prensa burguesa, cámaras de seguridad hasta los supuestos medios alternativos, al fin y al cabo forman parte de la delación colectiva que el gobierno mismo usa como forma de persecución y las utiliza en contra lxs que de forma activa participamos en las distintas luchas ya sean las calles, espacios, publicaciones y en el cotidiano de la vida misma. En momentos de agitación y conflicto no podemos permitirnos ser pasivxs frente a las personas que pueden ser infiltradxs o bien luego vender sus imágenes a la policía. En las calles estamos para protestar, y muchxs de lxs que graban se desvinculan de la lucha resguardadxs detrás del lente, necesitamos menos cámaras y más acción.

Las armas que utiliza el Estado fascista y la economía neoliberal contra cualquier vestigio de rebeldía e insumisión, históricamente ha sido la represión, persecución, asesinato, tortura y cárcel, con lo que intentan silenciar las acciones y las voces disidentes, está en nosotrxs hacerle frente, vencer el miedo y tomar la vida en nuestras manos.