Con rostros tristes y cansados, con las características propias después de una pesadilla que duro varios meses, pero con dignidad y determinación en la mirada, los padres y las madres de lxs condenadxs en el caso de la Conspiración de Células del Fuego, dieron la bienvenida a amigxs, periodistas y decenas de otras personas de distintas edades, reconocidos o no, que llegaron a la sala de ESIEA (Union de periodistas del Daily Newspaper de Atenas) para una conferencia de prensa.
Una semana después de la decisión de los tres miembros de la corte de apelaciones que condeno de 11 a 25 años a prisión a seis de lxs nueve acusadxs, los padres, madres y abogadxs de lxs condenadxs no están dispuestos a rendirse. En la conferencia de prensa acusaron al tribunal de una “decisión política”, “inhumana y vengativa”, ellos reclamaron una vez más que las tres explosiones no causaron lesiones o muertes de nadie para justificar un total de 130 años de prisión que el tribunal repartió a sus hijxs.
Un silencio prevaleció en la habitación cuando con una voz temblorosa la señora Hadjimihelaki madre de Haris Hadjimihelakis (de 19 años) condenado a 25 años de prisión, leyó la declaración colectiva de lxs padres y madres. “Fue una decisión injusta, cruel, exhaustiva, absurda, arbitraria, inhumana, vengativa. Fue una decisión basada en al lógica nazi de responsabilidad colectiva, teniendo como objetivos a individuos basándose únicamente en su ideología”, señalo la señora Hadjimihelaki.
Ella agrego que “las infames “explosiones” fueron demostradas que no han causado ningún peligro a alguna persona y las declaraciones de los testigos han aclarado absolutamente que eran acciones dentro de la “esfera” de la protesta política”. En cuanto a los resultados de las “explosiones”, incluso mediante la experiencia de las personas responsables de los servicios, se demostró que se trataba de petardos con una cantidad no estandarizada de pólvora, lo que pueden provocar una deflagración y no una explosión”, ella menciono.
Ella siguió en términos políticos, insistiendo que “la justicia castiga brutalmente y sin piedad destruye a gente joven por conjeturas y conclusiones y no por acciones. Y deja impune a los involucrados en enormes escándalos políticos y económicos, que ponen en resigo la vida de personas y la estructura constitucional del país”.
Relacionado:
- Dictan condenas en el primer juicio contra la CCF, Grecia.