El 1 de noviembre pasado fueron detenidos en Atenas dos compañeros anarquistas, Gerasimos Tsakalos de 24 años y Panagiotis Argyrou de 22 años. Los dos fueron arrestados mientras entregaban a empresas de envíos unos paquetes incendiarios destinados a varias embajadas. Mientras que Gerasimos fue simplemente fichado como anarquista, Panagiotis estaba en busca y captura desde octubre de 2009 acusado de pertenecer a Conspiración de Células del Fuego y además tenía pendiente un caso por el incendio de autobús de empresa de trasporte público de hace un par de años. El 22 de noviembre los dos, más Haris Hadzimihelakis que está en cárcel preventiva desde septiembre de 2009, asumieron su pertenencia a Células. Aquí sus cartas:
http://www.lahaine.org/index.php?p=49699
El 25 de diciembre la Conspiración de Células del Fuego reivindicó el envío de paquetes:
http://www.lahaine.org/index.php?p=50208
El 4 de diciembre hubo una gran operación antiterrorista. Durante éste día y los siguientes, policias asaltaron y registraron muchas casas en región metropolitana de Atenas y en la provincia, reteniendo a varixs compañerxs. Entre las 6 personas (5 hombres y una mujer) que luego resultaron encarceladxs, se encontraban Giorgos Karagianidis y Aleksandros Mitrousias, que estaban en busca y captura por el caso de las Células del Fuego desde el septiembre de 2009. Aleksandros quedó detenido junto a un otro compañero, Konstantinos Sakkas, saliendo de un garaje en el barrio de Nea Smyrni. Tenían encima una bolsa con dos pistolas “Glock” , una semiautomática “Scorpion” y una granada de mano. En el garaje la policía encuentra además: 3 semiautomáticas, 7 pistolas de diferentes marcas, 50 kg de material explosivo ANFO, 4 granadas de mano , 3 Kalashnikov, un silenciador, cantidad de balas y 200 g de TNT. En un otro lugar la policia encontro también más de 30 carnets de identidad falsas y un par de otras cosas poco “legales”. Giorgos Karagianidis fue detenido en un piso en Pireas. Tanto Giorgos como Aleksandros negaron tener cualquier relación con Células del Fuego. Como otra gente más, los órdenes de busca y captura fueron sacados contra ellos en finales de septiembre de 2009 a base de sus huellas dactilares encontradas en casa de Hadzimihelakis, en el notorio “piso franco” en el barrio de Halandri, donde empezó todo. Al respecto de las 6 detenidos del 4 de diciembre, lxs cuales por parte ni se conocen entre ellxs y fueron arrestadxs en sitios diferentes, las autoridades al no poder de atribuirles ningún ataque concreto, puesto que todas las armas eran limpias, hablan sobre “una nueva organización terrorista”. Por no querer ofrecer unas noticias basadas solamente en las declaraciones policiales y artículos de prensa burguesa, nos hemos demorado conscientemente con escribir algo sobre estos hechos, esperando a que lxs mismxs detenidxs dijeran algo. Hace una semana, uno de lxs arrestadxs y a la vez anarquista muy conocido, Hristos Politis, ha escrito una carta, la cual se intentará de traducir lo más rápido posible.
El 22 de diciembre los 3 encarcelados miembros de la Conspiración: Hadzimihelakis, Argyrou y Tsakalos declararon que Mitrousias y Karagianidis no tienen nada que ver con el dicho grupo.
Recordamos que el juicio por el caso de Células se celebrará el 17 de enero en sala de juzgados de cárcel de Koridallos en Atenas. El grupo sacó un llamamiento por la solidaridad:
http://www.lahaine.org/index.php?p=49700
El 17 de enero serán juzgadas 13 personas en concreto: Panagiotis Masouras (en cárcel preventiva desde septiembre de 2009, niega la pertenencia), Haris Hadzimihelakis (en cárcel preventiva desde septiembre de 2009, recién asumió la pertenencia), Konstantina Karakatsani (fugada desde septiembre de 2oo9, en cárcel preventiva desde abril de 2010, niega la pertenencia), Panagiotis Argyrou (fugado desde septiembre de 2009, en cárcel preventiva desde noviembre de 2010, asumió la pertenencia), Aleksandros Mitrousias (fugado desde septiembre de 2009, en cárcel desde 4 de diciembre de 2010, niega la pertenencia), Giorgos Karagiannidis (fugado desde septiembre de 2009, en cárcel desde 4 de diciembre de 2010, niega la pertenencia), Manolis Giospas (detenido en el septiembre de 2009, en libertad provisional desde abril de 2010), Nikos Vogiatsidis (fue encarcelado por el caso durante un mes en febrero de 2010, en libertad provisional desde entonces), Errikos Rallis ( fugado desde noviembre de 2009, detenido en marzo de 2010 y soltado en libertad provisional dentro de unos pocos días) y además 4 personas que están en busca y captura (3 de ellos desde el octubre de 2009 y el cuarto, que es hermano mayor de Gerasimos Tsakalos, el orden de busca y captura contra él fue sacado una semana después de detención de Gerasimos por los paquetes).
Gerasimos no va a ser juzgado el 17 de enero y por esto podemos hablar simplemente de “primer juicio por el caso de Células”.
El 25 de diciembre fue publicada esta carta de Gerasimos que reproducimos aquí:
Por la mañana de 1 de noviembre, junto con el compañero y hermano Panagiotis Argyrou nos estuvimos moviendo por la zona de Pagrati para actuar en el marco de la campaña de solidaridad internacional que fue decidida por nuestra organización. Pero, debido a la curiosidad policial de una empleada de empresa de envíos, como también a algunos errores nuestros en lo que se refiere a cómo hemos manejado la situación, más el hecho de que fuimos arrodeados por cerdos de brigada DI.AS. y luego otras fuerzas policiales que cerraron toda la zona, no tuvimos mucho margen de opciones y así hemos terminado en el edificio de la Comisaría Central, en la planta de Sección Antiterrorista. A pesar de que fui reconocido inmediatamente, puesto que uno de los jefes de alguna sección, entre patadas y puñetazos que recibía mientras estaba sentado y inmovilizado, jubilosamente gritó “¡Es el Makis!”, durante primeras horas me he negado a revelar mis datos, con la esperanza de ganar el valioso tiempo y así hacer la cosa más fácil para mis compañeros. Nos hemos negado que nos tomen huellas dactilares, fotografías, pruebas de ADN y en general nos hemos negado a firmar cualquier cosa o ayudar, aunque sea mínimamente, a esos cerdos, manteniendo la postura que por supuesto debe que tener cada revolucionario.
La interrogación empezó, como se entiende por sí mismo, con los insultos. Sin embargo, estos comentarios ofensivos por algún tiempo se redujeron, cuando ellos descubrieron que tengo un tatuaje con palabra en ingles “conspiracy” (conspiración), el hecho que les llevó a cambiar su trato. Sabiendo que van a intentar sacarme unas fotos para luego publicarles, me quedé sentado con cabeza agachada para evitarlo. Entonces, fingiendo que me van a llevar a los calabozos, me sacaron en el pasillo de planta 12 y giraron mi cabeza diciendo que tengo que ver a donde voy. En este momento una cámara me sacó la foto. Era esta fotografía que fue publicada como primera después de nuestro arresto. Así empezó una interrogación que duró más o menos 3 días y fluctuaba según lo que iba ocurriendo fuera. Enojados por escuchar como continuamente repito “no tengo nada para declarar”, empezaron otra vez a provocarme con insultos y comentarios, tanto sobre gente que conozco, como los que no. Las interrogaciones se hacían en dos habitaciones, y en una de ellas, allí donde me pude comunicar con mi abogado y mi madre, un oficial de la Antiterrorista, desde luego el último día, mencionó que fueron habitaciones con cámaras y micrófonos.
En lo que refiere a mi ADN, justo después de que fui detenido, me han confiscado los calcetines para obtener dicha prueba, y durante el traslado, cuando me empujaron la cabeza hacia abajo, alguien con guantes quirúrgicos me tiró fuertemente los pelos, otra vez para el ADN. Su ansiedad y angustia iban creciendo, cuando veían nuestra postura negativa ante sus cuestiones, mientras que al mismo tiempo fuera los paquetes incendiarios seguían siendo entregados, de acuerdo con el plan de nuestra organización. Se aumentaron las amenazas, me dijeron que en el caso sí habrá problemas con algún avión me van a matar en algún descampado de la cuesta del cerro de Imittos o me tirarán por la ventana. Evidentemente se referían al avión que aterrizó en Italia con el paquete para Berlusconi. Seguían con sus disparates, diciendo que supuestamente pasaba los últimos tiempos por algunos locales nocturnos y que allí se fijaron de mí, como también que la empleada de empresa de envíos murió por el paquete, más unas otras estupideces, y así intentaban sacar alguna cosa de mí.
Todo esto lo estoy contando no como “víctima de violencia policial”, puesto que no me siento en lo más mínimo como tal, sino para aportar con un par de experiencias vividas, para que sí algún luchador en momento de “mala suerte” se encontrará por allí, podría tener una imagen de la situación que tendrá que afrontar. Las amenazas y la violencia de parte de la policia es algo que se tiene que esperar y tener en cuenta como las características fundamentales de su papel. Además, miles de detenidos sufren unas torturas salvajes en cada comisaria, lo que hace que su trato contra mi persona parezca “civilizado”. No pedimos ni una policía mejor ni que la humanicen, sino queremos su completa aniquilación tras la opción del ataque permanente. No existen policías buenos y malos, existen simplemente policías, y las Organizaciones Revolucionarias siempre deben que tenerles en su punto de mira, con cada medio.
Soy miembro de la Conspiración de Células del Fuego, pertenezco al ámbito anarquista-revolucionario y estoy orgulloso de esto. Representó la nueva corriente, el Nihilismo Revolucionario y el Anarquismo Antisocial. Creo que el Poder no son solo las leyes, la policía, los jueces, las cárceles, los políticos. No quiero decir que los dirigentes y los que manejan son unos inocentes. Desde luego que es exactamente al contrario. Toda esa gente que tiene puestos de poder son un montón de escoria, mentirosos, impostores y sádicos, que toman toda una serie de decisiones que tienen para nosotros unos resultados catastróficos. Esto es un hecho indiscutible. Pero, ¿quién vota por ellos? ¿Quién les respeta agachando su cabeza? ¿Quién les admira y quiere que él mismo, o por lo menos sus hijos, se parecieran a ellos? ¿Quién se está callando delante las injusticias que cometen? Hay una sola respuesta. LA SOCIEDAD. Ella les elegido, ella les dio fuerzas para que tomen sus decisiones por ella. Y sí vamos a aceptar que todos tienen derecho de equivocarse una vez, el hecho que todo el tiempo se produce de nuevo el mismo error trágico, a mí me parece algo intencionado. Así, mientras que las muchedumbres a menudo protestan cuando se trata de su sueldo, a pesar de todo aceptan a los órdenes tiránicos del Poder, y muchas veces hasta les piden. Dejan que el Poder espíe la ciudad con sus cámaras, le permiten equipar el ejército con nuevos sistemas militares, llenar las calles con policías, dar órdenes desde las pantallas de televisión, mientras que bastaría con un “No”. Un fuerte, decidido y directo No. No a la opresión, no a la explotación, no a la reconciliación. Sin embargo la mayoría, detrás de las chulerías que sueltan mientras están conduciendo y detrás de los estallidos de su pequeño poder que muestran ante sus familias, simplemente esconden su cobardía y desgana de tomar la vida en sus propias manos. Es algo que no aguanto. Esta renuncia de la vida. Por esto me auto-denomino como Anarquista Antisocial. Porque considero que lo que tenemos que continuamente cuestionar son las relaciones sociales en sí, la forma que tomaron hoy en día. Con mis actos y mi critica rechazo a la masa que mantiene a esas relaciones enajenadas y sea mantenida por ellas. Soy enemigo del régimen y de la sociedad misma en su forma existente. La fe en mayoría de los oprimidos, la creencia en “exculpación” de su pasividad y el hecho de reconocerles como “sujeto revolucionario en estado de hipnosis” dado la opresión que están sufriendo, no nos caben más. Desde este conjunto de masa, tenemos que atacar, con nuestro discurso y con los hechos, a las características de subyugación que esta posee, para que se crearán aquellas minorías que, con Consciencia y Ética Revolucionaria, van a rechazar a los valores de la civilización dominante. Solo a base de dignidad, orgullo y honor, las búsquedas teoréticas se hacen realidad como opciones de actuar. La teoría practica de la destrucción de lo existente en todas sus formas, será el medio que va a reunir los sectores sociales minoritarios hacia una perspectiva Revolucionaria. Estamos en guerra contra ese sistema y sus súbditos. Estamos en guerra contra una sociedad, que como sus aspectos típicos tiene la fe en ilusiones electorales, el temor a la alteración del orden de las cosas y, por fin, el terrible miedo de hacer un paso hacia el cambio, cambiar por algo nuevo, por algo imprevisible. Pequeña burguesía, proletarios, burgueses, inmigrantes son diferentes sectores, a los cuales el Dominio, funcionando ya más bien con perspicacia que con el cinismo que llenaba su discurso hasta ahora, ofrece la oportunidad de una subida social. Una perspectiva deseada por muchos, pero factible para unos pocos. Una perspectiva que lo apacigua todo, manteniendo la fe en el sistema, irrompible conectada con sus ambiciones personales. De este modo, unos sectores sociales muy diferentes entre sí comparten el mismo deseo para conservar a lo existente, y este deseo se convierte en un aspecto básico de sus decisiones.
Seguramente, considerando nuevos dados de la crisis económica y sabiendo que aún se trata de su comienzo, se da la sensación que ahora, cuando los privilegios de las clases medias y clases bajas casi se están tocando, sea de nuevo oportuno ver el proletariado como sujeto revolucionario. Para nosotros, la ideología dominante del sistema es la economía, la que dirige a una masa de gente y les “ofrece” algo, sea una promesa de abundancia de los bienes materiales, o sea el miedo a la escasez y la pobreza. Sí estas consecuencias negativas que la crisis económica guarda para el futuro van a traer estas minorías una más cerca del otra y llevarles al rechazo de ese sistema, por cierto que esto sería algo positivo.
No obstante, al revisar un poco la historia del siglo pasado y las condiciones después de las crisis semejantes a esta crisis económica que vivimos hoy en día, muestra que un descontento temporal casi nunca se convierte en un rechazo y una ruptura total. Por esto no pretendemos de difundir nuestro discurso y practica enfocándose solamente en la fealdad de las condiciones económicas, pues algo que podría ser simplemente una fase transitoria del capitalismo mismo, sino ponemos énfasis a la permanente miseria existencial, esta siendo la invariable consecuencia de ese mundo.
Promulgamos el paso a una crítica más total y al ataque contra la miseria de comunicación, contra los sentimientos artificiales, la falta de dignidad, las pequeñas y grandes expresiones de relaciones sociales autoritarias, la carencia del deseo de arriesgarse en la búsqueda y contra el miedo de ruptura necesaria para una vida más libre.
Queremos crear una red revolucionaria constituida por decenas de organizaciones clandestinas y individualidades, que con sus permanentes ataques y actos sostendrá a la nueva guerrilla revolucionaria difusa. Alejada de tabús que están difamando a unos medios y opciones de la lucha. Las molotovs, las bombas, las piedras, las armas son simplemente medios, y el sujeto que los utiliza les da unas características que él mismo elije. Pues, tenemos que apropiarles de ellos y hacerles parte de una guerrilla urbana polimórfica y difusa. No creemos en ningunos “especialistas de la violencia”, ni en las vanguardias revolucionarias, ni tampoco en la jerarquización o fetichización de los medios según las consecuencias legales que puede conllevar su uso. Son la consciencia y la eficacia que determinen a los medios que vas a utilizar contra cada uno de los objetivos. Hubo, hay y seguirá habiendo gente que colectiviza sus negaciones, que comparte sus vivencias y experiencias, que se organiza y monta grupos revolucionarios, que se prepara y ataca. La gente que rechaza por completo el sistema existente, que arriesga su vida y su libertad por lo que les está dictando su consciencia y su dignidad. Guerrilla difusa, porque cada uno y una puede ser su parte y puede aportar a su desarrollo y evolución. Teniendo la consciencia, la responsabilidad, el ánimo y la fantasía, recogiendo informaciones y utilizando materiales fáciles de obtener, se puede llevar a cabo unos ataques todavía más eficaces. La continua profundización de las infraestructuras materiales y técnicas es nuestro deber, tanto como la permanente búsqueda teorética y la continua evolución de los revolucionarios mismos y sus grupos. Es nuestra deber hacernos más consecuentes, más inmediatos, más puntiagudos y más peligrosos. La teoría en práctica, esto es lo que proponemos y estaremos totalmente consecuentes con esto.
Independiente sí existe o no la perspectiva de una confrontación directa y masiva con el sistema, estamos viviendo y ponemos manos a la obra para lo de ahora. Para satisfacer a nuestro ego y para la realización individual de nuestros deseos, que se colectivizan dentro de las infraestructuras de la guerrilla revolucionaria difusa.
Promulgamos la formación y autoorganización de grupos clandestinos enfocados en la destrucción de los símbolos materiales y los representantes del sistema. Además, queremos que el rechazo del trabajo sea una inseparable parte de la nueva guerrilla urbana, una práctica más, siempre conectada a las otras opciones de lucha. Los atracos a bancos y a otros objetivos capitalistas, los saqueos organizados de los templos del consumo, el robo de productos de los supermercados y otras tiendas grandes, no son nada más que aplicación de la teoría a la práctica. Nos negamos a vivir la condición de la esclavitud asalariada y elegimos un otro tipo de vida, la vida del saqueo de riqueza guardada en los bancos y por los ricos, la vida clandestina en un mundo en que lo injusto y la explotación son la ley.
Las demostraciones van a adquirir un carácter conflictivo en cuando eso sea posible, y los compañeros usaran las multitudes de los “indignados” pequeño-burgueses que se están apilando en esas marchas fúnebres de los sindicatos amarillos, para efectuar los golpes todavía más relevantes contra los objetivos situados en los puntos centrales de la ciudad, lo harán utilizando la estrategia de “golpea y corre”.
Resucitaremos las barricadas y sobrepasemos los sindromas de culpa, que desde el 5 de mayo juegan el papel de obstáculo que impide la violencia rebelde.
Estableciendo unas infraestructuras clandestinas, organizando y preparando los ataques de un modo coherente, se va a evitar que tales acontecimientos ocurran en el futuro. El hecho de condenar en general a unos medios de lucha no es nada más que una óptica de mente estrecha, detrás de cual está latente la reconciliación con las formas de “lucha” reformistas y permitidas por el sistema mismo.
Por tanto, que se multipliquen los grupos revolucionarios y que saquen al escenario de la cotidianeidad la belleza de acción directa. No podemos dejar ni un centímetro del suelo a los enemigos de la libertad, pasaremos primeros al ataque con todos los medios sembrando el miedo en sus “pisos francos”, allí desde donde gobiernan sobre nuestras vidas.
Ahora, ya desde posición del cautivo, quería referirme brevemente a cómo percibo yo la cuestión de solidaridad.
La solidaridad es un concepto sobre el cual se tiene que construir las verdaderas relaciones de compañeros y ellas se convierten en los potros para la creación de procesos revolucionarios. Solidaridad no puede moverse en torno de un, carente de prácticas, motivo de la victimización de presos ni tampoco limitarse a las denuncias contra la arbitrariedad policial. Puede que sea la lógica de algunos anarquistas, que con su ansiedad de tener éxito dirigiéndose a la decadente mayoría social, elijen esa fácil postura defensiva para propagandizar a algunos casos de anarquistas presos. Seguramente existen montajes y casos en que sean criminalizadas relaciones personales, pero esto no significa que nuestro papel como revolucionarios es enfocarse en eso, y de hecho no proponer nada en concreto. Somos revolucionarios y no abogados, y por tanto nuestro discurso no sea definido por arbitrariedades legales de policías y jueces. Además, ellos tienen ese papel. No podemos tomar la solidaridad como una cuestión solo de amigos, porque así a menudo acabamos juzgando no tanto el caso mismo y la postura del detenido, sino en cuanto este es simpático y conocido dentro del nuestro ámbito. De este modo, las personas con una postura digna pero poco conocidas o poco “queridas” por algunos, acaban olvidadas debajo del altar de estas relaciones “privilegiadas”. La solidaridad tiene que ser un proceso ofensivo alejado de la graduación según relaciones de amistad, los cuales no pueden ser un criterio para sí la gente se moviliza por algún caso o no. Porque así acabamos en modelos de comportamiento y relaciones que reproducen a las de la civilización dominante, en vez de estas propias de la antiautoridad revolucionaria. Para mí, la solidaridad es un permanente proyecto de lucha, es la continuación y el desarrollo de la acción revolucionaria por cual fue capturado el compañero.
Se trata de un permanente ataque contra el sistema y contra la sociedad, una práctica en que no caben las palabras como montaje, inocente, culpable. Porque nuestro deber como revolucionarios es ser considerados por ese sistema siempre como culpables, es estar siempre peligrosos y siempre orgullosos por las decisiones que hicimos. No se nos persigue por nuestras ideas, sino porque nos parecería miserable sí no las convertiríamos en los hechos.
Para acabar, me gustaría reiterar lo que ha escrito nuestra organización y con que estoy totalmente en acuerdo: lejos de nosotros “las hienas de solidaridad”. Esa despreciable minoría que como unas espinas fijas parasita sobre nuestro ámbito y todo lo que hacemos. Siembran rumores y cotilleos por los pozos de las cafeterías y hasta por los teléfonos móviles, sin preocuparse que así pongan en peligro a la gente, hacen que la pre-condición de conspiratividad necesaria para existencia de una infraestructura o realización de un ataque se escucha como algo anecdótico. Esa gente está guiada por irresponsabilidad y residuos de instintos pequeño-burgueses, ofrecen alimento a la policía, es decir allí donde acaban este tipo de charlas. Un ejemplo recién fue el manejo de acontecimientos de 5 de mayo por esta parte del ámbito. Una práctica que sin duda estoy en favor, pues el incendio de un banco, fue realizada en la peor manera y se acabó con el triste resultado de tres muertos. Algunos anarquistas, obviamente influenciados por las tácticas propias de medios de comunicación, convirtieron salas de asambleas en “juzgados” en cuales presidían ellos mismos, esos conocidos despabilados del ámbito anarquista, y sus veredictos acabaron convirtiéndose en investigaciones de maderos para identificar a gente concreta. Así, a raíz de estos hechos otra vez entró en el punto de mira de la policía la nueva generación de anarquistas. Su “error” fue realmente el hecho que giraron la espalda a todos esos anarco-padres que reinan en las asambleas grandes, se organizaron por su propia cuenta, se “amasaron” desde la calle, vivieron las experiencias que te convierten en un verdadero rechazador de ese sistema y pasaron al ataque.
A todos esos politiqueros envilecidos les decimos algo que se entiende por sí mismo: tales comportamientos no se olvidarán, y por esto que ni se atreven a ocuparse del caso de la Conspiración o aparecer en nuestro juicio por la razón que sea. En el caso contrario habrá problemas, que será afrontado allí mismo o en otro lado. Esa gente, más esos pocos que quieren parecerse a ellos que se joden y que dejen el espacio para los jóvenes con pensamiento sano y consciencia revolucionaria que quieren actuar y son muchos.
Con esta explicación adicional todos pueden entender, que no me refiero a todo el ámbito anarquista/antiautoritario, sino a una miserable minoría de chivatos y cotillas. Quien piensa que estamos en contra de las movidas solidarias con prisioneros que luchan, quizás nunca han leído nuestros comunicados. Sea con mis actividades como parte de Coordinadora de Acción por Presxs en Lucha, sea a través de los textos de nuestra organización, la cuestión de prisioneros era y está presente en nuestras debates de cada día, además tiene una importancia particular para nuestro pensamiento. Porque el que olvida a los cautivos de guerra, acaba olvidando a la guerra misma. De este modo respeto a los anarquistas, que utilizando diferentes medios, pero basándose en sanos procesos revolucionarios, obran dando fuerza a todos nosotros aquí dentro y a la vez se proponen la ruptura con el sistema existente. A los proyectos que promulgan una solidaridad polimórfica y ofensiva los apoyo totalmente, puesto que los considero el mejor potro para amasar, fermentar y desarrollar las percepciones y prácticas.
Por fin, mando mi respeto y amistad a las tropas Revolucionario-Nihilistas que muestran su fuerte presencia en las recientes demostraciones en Atenas. Les alzo mi puño en saludo desde detrás de los muros. Señales guerrilleros mando también a las organizaciones de nueva guerrilla urbana y a los enfurecidos compañeros de Tesalónica y de provincias, los que muestran que nada se ha acabado sino al contrario: la nueva guerrilla urbana ahora empieza…
LUCHA POR LA REVOLUCIÓN
RESPETO Y SOLIDARIDAD A LOS NO-ARREPENTIDOS GUERRILLEROS DE 17 DE NOVIEMBRE Y A LOS PRESOS CRIMINALES Y POLITICOS QUE ANDAN CON EL PASO DE LA DIGNIDAD
ESTAMOS EN GUERRA
Gerasimos Tsakalos
Miembro de Célula de Presos de Conspiración de Células del Fuego
Cárcel Malandrinos
Fuente: barcelona.indymedia.org