“Se acabó la guerra”…fueron las palabras que escuchamos tras la primera sesión de golpes por parte del grupo ERTA (Equipo de Reacción Táctica) de la policía de investigaciones, encapuchados, con armas en la mano, cascos, escudos y todo un aparataje compuesto de herramientas y fetiches para la represión sobre su uniforme. A las 6 de la mañana del viernes 11 de diciembre…
Sabíamos hace meses que llegarían, porque las amenazas se han podrido en la boca de quienes detentan el poder. Desde el más encumbrado, hasta el último lacayo de la lista, todxs han vociferado que las okupaciones y los centros sociales están en el ojo del huracán y que tendrán que ser castigados por el imperdonable delito de oponerse a la autoridad.
Así están las cosas. Semana a semana recibíamos las advertencias por la prensa. Los últimos días escuchamos las declaraciones de Rosende, quien anunciaba que los allanamientos y detenciones se producirían en el transcurso de una semana. Al concluir el plazo y no concretarse los operativos, quedó en ridículo frente al país. A nuestro juicio, un cerebro de mayor rango orquestó una jugada estratégica a solo dos días de las elecciones (en donde el candidato oficialista no tiene opción de ganar). Buscando mostrar eficacia frente a un tema que les avergüenza: la inexistencia de culpables de los atentados explosivos de los últimos tres años.
Frente al vacío de culpables inventaron la figura a detener o neutralizar: “el okupa”. Crearon mediante esquemas de conducta, un enemigo al que atacar. Ya no es una figura difusa que atenta contra los poderosos, no, ahora y gracias a su imaginación, hay un modelo al que perseguir, el okupa joven y vegetariano.
“Gracias a Dios los fiscales finalmente dieron la orden para poder allanar… y vienen en un buen momento” Ministro del Interior, Edmundo Perez Yoma-11 diciembre.
Cuando el sol apenas se asomaba, nuestra calle fue cerrada mientras se apostaban frente a la casa dos furgones blindados. Nos despertaron los golpes de una turba de enajenados. Nos defendimos con lo que pudimos, aún concientes que nada detendría el avance de los más de cincuenta hombres y mujeres que trabajan para el poder, que lo defienden y lo desean.
A nuestros gritos de desprecio le sucedieron ráfagas de disparos, el diálogo típico del capital, que sin maquillaje evidencia la igualdad entre dictadura y democracia. El nombre da lo mismo cuando el Estado se impone sobre las personas. Sabemos de aquello, las marcas en el cuerpo nos hablan de lo que ocurre al no aceptar a un invasor. Cientos de años pasados tenemos para adquirir esa experiencia.
La policía estrenó con nosotrxs nuevos juguetes, fusiles y escopetas con mira láser nos dispararon balines de gas pimienta y de goma. A nuestro hogar mandaron una tropa que ansiaba el enfrentamiento pues abajo en la calle dos bufones esperaban preparados con extintores, evidentemente temían la aparición del fuego.
Al entrar inician la destrucción de todo lo que se apareciera a su paso, puertas, techo, muebles, piso, libros, fotos, ropa, plantas, etc.
Ya estaban en la casa y el ruido de todo rompiéndose era el antecedente de lo que se nos venía. Cerca de diez miembros de ERTA intentaban reducirnos, la luz de los fusiles quería amedrentarnos, pero no lograba conseguir que nos arrodilláramos. De ahí la lluvia de golpes, los insultos, las ofensas, las esposas apretando hasta el límite nuestras muñecas, un día de trabajo normal para lxs sirvientes de los poderosos. Sólo rutina, nada especial.
Ingresan policías de todos los tamaños, rangos, divisiones y portes. Mientras unos sacaban fotos, otros rompían, mientras unos custodiaban, otros golpeaban, mientras unos gritaban, otros tomaban café. Cada cual buscaba en que entretenerse…
De nuestra casa se llevaron la célebre lista de los allanamientos anteriores, herramientas, ropa, afiches, bicicletas, jugueras, ralladores, computadores, pendrives, etc.
A las dos horas de investigación nos llevan a constatar lesiones, al salir de la casa nos sorprendemos, estamos solos. Solos en manos de los ratis, a los ojos de la prensa. ¿Dónde estaban hermanxs?….en ese momento ignorábamos que se había desplegado un operativo en toda la manzana, que una cacería de compañerxs se estaba llevando a cabo, que otras seis casas estaban siendo allanadas.
A muchxs compañerxs cerca de nuestra casa se les controló la identidad, algunxs fueron detenidos, otrxs amenazadxs, hasta a los vecinos se les impidió acercarse. No querían testigos. Es evidente cuanto ofendieron, el orgullo de los poderosos, las muestras de solidaridad del 22 de mayo tras la muerte del hermano Maury. Por ningún motivo querían que otra vez se produjeran enfrentamientos.
Ya en las dependencias de la BIPE (Brigada de Investigaciones Policiales Especiales) se nos informa que estamos detenidxs por agredir a un policía y por dañar dos carros blindados (blindaje de muy mala calidad por lo visto). Se nos muestran algunas de las cosas incautadas, como libros revistas y cientos de cds. Allí mismo a algunxs de nosotrxs se nos pide declarar y se nos arrancan mechones de pelo que constituirán una muestra de ADN. Nos negamos y gritamos, pero ya estaba todo hecho.
A la par la casa intentaba ser “clausurada” por carabineros, objetivo que era impedido por compañerxs solidarixs que llegaron a limpiar y ayudar en lo que podían.
Se nos pesó, midió, tomó huellas dactilares y fotografió con el mejor rostro que podíamos mostrar, el del orgullo guerrero. Ya en la tarde y al sacarnos del cuartel la prensa esperaba ansiosa nuestros rostros avergonzados, pero solo recibió insultos y proclamas de agitación.
Fuimos conducidos al Centro de Justicia y quedamos en vigilancia de Gendarmería. El trato aquí también fue el de siempre, insultos, humillaciones, manoseos y golpes. Algunxs de nosotrxs debimos enfrentar aún esposadxs una sesión de patadas y puñetazos. Los gendarmes no soportan que alguien mantenga la dignidad, pues nada en ellos conoce ni entiende aquella palabra.
Frente a todo lo ocurrido hay mucho sobre lo que reflexionar. El allanamiento simultáneo es un claro ejemplo del estilo italiano, mientras que los registros de casa en vísperas de las elecciones es un procedimiento muy conocido en Grecia. Queda evidente que el internacionalismo es aplicado por los enemigos, quienes comparten estrategias y métodos de acción. Frente al internacionalismo de los poderosos, nosotros levantamos el internacionalismo antiautoritario. Ello debiese permitirnos trazar los pasos a seguir, aprender de experiencias y no sorprendernos.
No olvidemos que han sido los propios gabinetes ministeriales quienes han confirmado la asesoría del fiscal italiano Antonio Marinni, para empezar a entender las posiciones anárquicas, insurrectas y antiautoritarias. Hace poco más de un mes también fue confirmado que las policías chilenas recibían indicaciones de miembros del FBI. Como la represión no conoce fronteras, es evidente que la solidaridad tampoco debiese entramparse en asuntos geográficos impuestos por las ansias de conquista de algún monarca ya muerto. Nuestro terreno de acción es la Tierra toda, no conocemos límites, ni ficticias barreras.
Aquello origina también este comunicado y la decisión de poner en colectivo nuestra visión frente a los hechos y lo que nos tocó atravesar, porque no queremos que lo vivido se quede en el círculo íntimo de los afectos cercanos.
Esto es parte según nosotros, de tener una perspectiva de lucha, en donde se comprende a cabalidad que los golpes que nos afectan están enmarcados en la guerra social, que el enemigo inició hace ya muchos años.
Lo que vivimos hace un par de días se enmarca en una jugada represiva que no pretendía avasallarnos solo a nosotrxs, si no que a muchxs compañerxs más, de distintos espacios y con matices de diferencia en la crítica contra el capital, pero en donde cada unx visualiza claro al enemigo.
El real objetivo de la jornada de allanamientos, inclusive aparte de buscar pruebas que nos inculparan, se enmarca más en el efecto que el eco de las detenciones provocaría…..la señal es clara, a quienes se opongan a toda forma de autoridad les espera un tropel de policías por enfrentar, disparos, manoseos, robos, golpes, secuestros y humillaciones. Están empeñados en robarnos la vida que nos construimos, aniquilar nuestra forma de pensar, desenvolvernos y sentir, se han propuesto eliminar la disidencia que saben se mantiene intacta en cada unx de nosotrxs.
Detrás de estas líneas no se esconden ansias de figurar o de acaparar protagonismo, de centralizar la lucha o de “farandulizar” un momento represivo determinado. Desde este espacio lo que nos hemos propuesto desde hace años es poder ser un aporte en la expansión de las ideas antiautoritarias, en la noción clara de combate permanente al poder. Por ello hemos puesto en colectivo nuestras reflexiones y vivencias, pues entendemos que para los poderosos no son solo nuestras, porque en el golpe a personas puntuales buscan dar lecciones al resto. Quienes no lo entiendan ahora, estamos seguros lo entenderán quizás mañana, cuando comprueben en la práctica que a los equipos represivos bien poco le importan las particularidades de carácter de cada persona a la que le revientan el hogar.
Circunstancias como esta nos hacen reflexionar y ver lo evidente, la necesidad imperiosa de que se multipliquen las okupaciones, los espacios colectivizados y las expresiones callejeras con una clara visión antijerárquica. Los espacios como éste y tantos otros, si bien son golpeados y traen aparejado una innumerable lista de defectos (desde los represivos, hasta los de orden íntimo) son y en esto somos tajantes, un aporte real, concreto y eficaz.
Contar con lugares donde conseguir información, poner en tensión ideas y desenvolverse sin lógicas autoritarias es fundamental para hacer carne todo aquello que construimos con palabras. Aunque son golpeados de tanto en tanto, aún cuando mil ojos nos vigilan, podemos ver la importancia del intercambio de experiencias y de la retroalimentación en lo cotidiano. No es la única forma de enfrentarse a los poderosos, quizá no es la mejor, pero es una forma válida y negar aquello es no comprender que el enfrentamiento al orden impuesto se ejecuta desde distintas aristas.
No podemos estar felices o tranquilos con la resolución del allanamiento y nuestra detención. Hoy estamos en la calle, en nuestra casa, intentando reconstruir lo que quedó, para el futuro inmediato esperamos nuevos golpes, entendemos que esto es solo el principio, una nueva modalidad de allanamientos simultáneos a días de fechas emblemáticas.
Que la jugada no haya terminado con detenciones inmediatas, no es garantía de nada. Suponemos que pronto irán “apareciendo” evidencias, objetos y escritos que a la fecha desconocemos. Es el actuar típico de las policías y aún cuando no nos sorprendemos, tampoco nos deja indiferentes.
Desde acá enviamos un saludo afectuoso y cómplice a todxs quienes nos acompañaron ese día. A quienes intentaron llegar hasta la casa o nos quisieron ver en la BIPE, a quienes defendieron nuestro hogar y cuidaron lo que quedaba, a quienes nos acompañaron en la audiencia y nos dieron fuerza con cada mirada y aplauso, a quienes se acercaron con un alimento, a quienes mandaron palabras de aliento. Gracias compañerxs, gracias a todxs ustedes es que sentimos la fraternidad de la guerra, esa que solo quienes la han vivido pueden comprender.
Fuerza y animo para los demás espacios allanados, donde los compañerxs se enfrentaron sin miedo ni respeto a quienes intentaban ponerle las botas encima. Orgullo nos genera ver las imágenes de sus gestos de resistencia.
También nos hermanamos con los compañerxs de otras partes del mundo, que pese a estar secuestrados por el Estado desde hace años, mantienen viva la llama de enfrentarse al poder y que próximamente llevarán a cabo una semana internacional de agitación dentro de las cárceles.
Por último queremos agregar un saludo y reconocimiento al esfuerzo que se da desde otras regiones de Chile, donde podemos ver claramente como se expande la sed de revuelta.
“Se acabó la guerra”… …que equivocado está el lacayo del ERTA !LA GUERRA SOCIAL NO PARA!!
“Pero es hora de que sepan que no hay ley que respetemos, que si hay que pelear atacaremos sus cuellos, que si hay que enfrentarse mataremos a sus perros, que si hay que morir, morirán ellos primero. Y mi canto no es de llanto y mi canto no es protesta, que este canto que yo canto es un canto de pelea”
Canción del hermano, compañero, amigo y guerrero Mauricio Morales, el Punky Mauri.
Centro Social Okupado y Allanado Sacco y Vanzetti
13 de Diciembre 2009, $antiago, $hile.
- Comunicado y reflexión respecto al allanamiento de “La Crota” y el “C.D.A.I.”.
- Un saludo fraterno a lxs compañerxs detenidxs y sus espacios allanados en santiago.
- URGENTE! Allanamientos y detenciones en Santiago, $hile.