El jueves 23 de septiembre, tras caer el sol la puerta de 5 celdas se abre e informan desinformadamente de un traslado sin destino: 4 compañeros y un burdo chivo expiatorio de la Fiscalía que desea utilizarlo como “testigo”, todos segregados a Santiago 1: Vinicio y Carlanga (en distintos módulos de Máxima Seguridad), yo y Camilo en distintos módulos de primerizos.
Separados en las separaciones, el poder desesperado busca quebrarnos con otra de sus sucias jugadas. Frente a las órdenes del poder (siempre buscado perjudicarnos) respondemos con una huelga de hambre líquida y de carácter indefinido, exigiendo nuestro traslado al CAS o una de sus dependencias (Máx. Seguridad).
Saciando el hambre de libertad con la firme decisión de nuestras convicciones contra los caprichosos traslados de los carceleros, el llamado es a movilizarse ahora.
¡¡SOLIDARIDAD CON LOS PEÑIS QUE LUCHAN EN EL SUR DENTRO Y FUERA DE LAS CÁRCELES¡¡
Septiembre 2010
Felipe Guerra, Pepa