” Que necesitáis cámaras y policía en exceso para pararnos, es la cosecha recogida con rabia y sembrada con mucha miseria y odio. Mientras los jóvenes precarios estén explotados y discriminados, mientras continúe existiendo este sistema que nos roba la vida, la sociedad racista y conformista, la casta política, tendrá el miedo por la amenaza social juvenil y precaria inculcada a flor de piel. Mientras haya desigualdad y propiedad privada no dormiréis tranquilos y sufriréis por vuestras propiedades privadas. Los disturbios son nuestra manera de hacer la guerra y la delincuencia subversiva la manera que tenemos los jóvenes de clases bajas para luchar contra la propiedad privada y la paz social.”