“El engaño mas grande es esa social democracia, que con sus mil y una ayudas, que con la nueva mentalidad policial, que con el castigo a la tortura, que con el bienestar ilusorio, hacen cada vez mas difícil que una persona “común” identifique al enemigo. Mejor es afirmar “a una parte del enemigo” ya que la otra parte vive en nuestras cabezas, y es esa mentalidad de “hombre” nuevo, que piensa antes de actuar contra el poder, que raciona antes de agredir a la policía en legitima defensa, que dialoga antes de entrar en un conflicto con las instituciones del Estado, es esa mentalidad la que esta sustentando el nuevo Estado democrático. El ciudadano sustenta su propia explotación. La mentalidad de la tolerancia y la mediación son y serán siempre benéficas para el Estado, pues en ellas sustenta las bases de la represión democratizada.”
Comunicado:
La lucha contra el gobierno se convierte,
a fin de cuentas, en lucha física y material…
El gobierno hace la ley…
Es necesario pues prepararse moral y materialmente para que,
al estallar la revuelta violenta, la victoria sea del pueblo…
Errico Malatesta,
Programma Anarchico (Bolonia, julio de 1920)
en «Umanità Nova» 12 de agosto de 1920
Esa preparación física y moral es una necesidad latente que debe de estar presente en la cotidianeidad de nuestras vidas y actos. Cuando el/la anarquista a nivel individual ha decidido dar un paso del palabrerío a la acción cotidiana esa acción adquiere en su vida un fuerte sentido, una fuerte importancia, una potencia que le da pie a seguir adelante y a no mirar hacia atrás para añorar la comodidad de su cobardía e ignorancia. Cuando un proyecto individual o colectivo es puesto sobre la mesa, el/la anarquista se siente ya en la humilde necesidad de dar todo por esa lucha que a comenzado, pues para el/ella no es una moda. La anarquía es la vida misma y en ella deja de lado el fetichismo revolucionario que en ocasiones llega mercantilizar la revuelta, no le importa vestir de negro, verde, azul o amarillo, o al menos no relaciona fuertemente estos folclores -gustos personales- con el fuerte de su lucha, no la identifica en ello y con ello. No le importa fetichizar las armas y las estrategias guerrilleras pues tiene en claro que eso solo son consecuencias inevitables en la lucha contra el poder, ni si quiera fetichiza la violencia. Madura en sus posiciones y se fija un objetivo, deja de lado pequeñas y cotidianas sumisiones al poder y enfoca sus pensamientos en una guerra irreductible contra el Estado/Capital. Se prepara física y psicológicamente. Cuestiona a cada momento esta existencia mundana y la confronta con sus teorías de libertad y conflicto. Entonces el/la anarquista ya no puede dar vuelta atrás, no porque el anarquismo sea un conjunto de lineamientos plasmados en los libros que son intocables tal y como una biblia, mas bien, porque a nivel individual y sin que nadie lo obligue, el/ella a decidido cual es su compromiso con una lucha que cree neta. Entonces –por lo menos individualmente- se mantiene irreductible al poder, lleva su lucha bajo sus propias premisas y pelea esta batalla junto a quienes enfocan su accionar contra el sistema de dominación en su conjunto.
Encontrándonos cómplices de las acciones bajo las cuales se encuentran presxs lxs compañerxs de la Conspiración de Células del Fuego y Lucha Revolucionaria en Grecia, así como con lxs demás presxs anarquistas en ese país del mediterráneo reivindicamos estas dos acciones, una se dio a conocer y la otra hasta el momento no se ha sabido nada sobre ella.
1.-Entre los días 20 y 25 de abril del presente año 2012 enviamos un paquete explosivo compuesto por un tubo de metal galvanizado relleno de dinamita, metralla, cables, baterías, el cual se debió de activar al abrirse mediante un circuito electrónico artesanal. El paquete fue encontrado el 1 de marzo e iba dirigido al embajador de Grecia en México. En las notas periodísticas se ha dicho que el paquete provenía a nombre del ex procurador de justicia del D.F. Miguel Mancera, confirmamos esta información.
2.- En los primeros días de Mayo de este mismo año, enviamos otro paquete explosivo de similar composición, igualmente al embajador de Grecia en México. Hasta el momento no se ha sabido nada del destino de este paquete.
Nosotros, por principios, estamos en contra de
la violencia, y por este motivo queremos que
la lucha social, mientras la haya, se humanice
lo máximo posible. Pero de ninguna manera
esto significa que la lucha tenga que ser menos
enérgica y menos radical, es más, creemos que
las medias medidas tienden a prolongar
indefinidamente la lucha, a hacerla estéril y a producir,
en fin, una cantidad todavía más grande
de esa violencia que se quiere evitar. Tampoco
significa que nosotros limitemos el derecho de
defensa a la resistencia contra la agresión material e inminente.
Para nosotros el oprimido
se encuentra siempre en un estado de legítima
defensa y tiene siempre pleno derecho a rebelarse sin
tener que esperar a que se le fusile,
y sabemos muy bien que muy a menudo el
ataque es el mejor método de defensa. Y aquí
entran en cuestión los sentimientos, y para mí
los sentimientos cuentan más que cualquier
razonamiento.
Errico Malatesta
28 de octubre de 1923
Luchas violentas, luchas no violentas, muertes, violencia, armas, legalismo, ilegalismo, civil, pacifico… las filtraciones para-estatales –y en su tiempo “burguesas” - en el anarquismo ya deberían de estar superadas y deberíamos de enfocar nuestros discursos en puntos objetivos sobre el como alcanzar nuestras finalidades. Es sabido que la violencia por violencia o por mera diversión no es una de nuestras finalidades. El atentado perpetrado por los servicios del Estado italiano contra la escuela de señoritas bien portadas que tubo suceso hace un mes, es un acto que no podemos aprobar, no porque sintamos algún tipo de compasión –ya que la ética del Estado/Capital no es la nuestra- es mas bien porque ese no es el enfoque que nuestra moral INDIVIDUAL nos dicta. Principalmente porque –lógicamente- no apoyamos actos que realicen los gobiernos, grupos fascistas o autoritarios. Nuestra violencia es dirigida contra lxs poderosos, sus instituciones y sus cuerpos represivos, contra los gobiernos, los grupos fascistas y autoritarios, porque es necesaria y porque es la única manera de tocar al poder, tocarlo mientras aun no se insurrecciona el mundo entero. Porque no queremos reformar el mundo y el acto violento es la una manera de cambio fuera de lo que el sistema puede asimilar. Por lo tanto estamos totalmente de acuerdo con la acción de Núcleo Ologa de la FAI en haberle disparado en las piernas al bastado de la energía nuclear, en Italia. Lo que no nos gusta es simplemente fetichizar este tipo de actos. Lxs anarquistas estamos lejos se ser guerrillas urbanas y grupos armados, somos ante todo grupos de acción anarquista, actuando en consecuencia con nuestros pensamientos, porque vemos que aunque sea una contradicción en si misma, la violencia es necesaria.
Mientras los mass medias que se proyectan mas o menos alternativos, democráticos, imparciales, críticos etc. Por un lado están vanagloriando a este movimiento llamado “Yo soy 123”, precisamente porque es el tipo de protesta que al Estado/Capital y su actual sistema democrático “les gusta”, porque son gente que respaldada por sus estudios critican, proponen, disponen, no rompen, no molestan en realidad, se promulgan por la legalidad y por actuar dentro de ella –todo esto es la imagen que proyectan-; Por otro lado tachan de “vándalos, rateros y delincuentes” a lxs estudiantes de Morelia, quienes se “encapuchan y no muestran sus rostros”, queman camionetas del gobierno, obstruyen las vías generales de comunicación, toman camiones y levantan barricadas, que de algún modo trastocan ese cristal polarizado de la llamada “paz social”. Estos hecho dejan más que claro cuál es el tipo de acto que el Estado detesta y cual sin más lo asimila y lo utiliza en su beneficio.
Así mismo estos mismos comunicadores del Estado como Pedro Ferriz de Con que alaba y proyecta en el 123 lo que siempre quiso ser y hacer, públicamente señala al vocero de la coordinadora magisterial de Oaxaca como “este señor es el subversivo, el provocador, el que quiere conflicto”, ect.
Lo que necesitamos es más conflicto y menos reformadores de la realidad. Este tipo de protestas democráticas, emanadas de quienes no quieren en realidad un cambio radical en toda la extensión de la palabra, como el 123 y sus demandas solo contribuyen a seguir construyendo esa mentalidad democrática en las instituciones del Estado. El engaño mas grande es esa social democracia, que con sus mil y una ayudas, que con la nueva mentalidad policial, que con el castigo a la tortura, que con el bienestar ilusorio, hacen cada vez mas difícil que una persona “común” identifique al enemigo. Mejor es afirmar “a una parte del enemigo” ya que la otra parte vive en nuestras cabezas, y es esa mentalidad de “hombre” nuevo, que piensa antes de actuar contra el poder, que raciona antes de agredir a la policía en legitima defensa, que dialoga antes de entrar en un conflicto con las instituciones del Estado, es esa mentalidad la que esta sustentando el nuevo Estado democrático. El ciudadano sustenta su propia explotación. La mentalidad de la tolerancia y la mediación son y serán siempre benéficas para el Estado, pues en ellas sustenta las bases de la represión democratizada. El buscar una solución a demandas parciales, porque son las que identifican problemas parciales es simplemente una exigencia al poder de regenerar su sistema, cosa por la cual como anarquistas no podemos abogar. Nosotrxs abogamos por la destrucción total del Estado/Capital porque solo de esa destrucción emana la única creación. Abogamos por los actos individuales y colectivos de ataque el poder, abogamos por la conspiración para la insurrección.
Para lxs anarquistas la lucha es y debe de ser fuera de la ley. Nuestros pensamientos, nuestras editoriales, nuestras acciones y nuestros propósitos, aunque muchos de ellos puedan ser públicos, son y serán fuera de los cánones legales del poder. Por eso rechazamos el mote de “ilegalistas o legalistas”.
Los anarquistas carecen de hipocresía. La
fuerza hay que rechazarla con la fuerza: hoy
contra las opresiones de hoy; mañana contra
las opresiones que podrían intentar sustituir a
las de hoy.
Errico Malatesta
«Pensiero e Volontà»,
1 de septiembre de 1924
No vamos a claudicar, siempre que unx compañerx sea encarceladx expresaremos nuestra solidaridad revolucionaria, atacando violentamente a las Estructuras del poder, y con ello a quienes físicamente los sustentan.
No podemos ser hipócritas convocando a la gente hacia su mismo matadero, haciendo creer que un movimiento de masas civil hará retroceder al Gobierno, ese tipo de ilusiones no son la realidad.
La fuerza hay que combatirla con la fuerza.
Núcleo de acción revolucionaria por la destrucción del Estado – Células Autónomas de Revolución Inmediata /Praxedis G. Guerrero.