Declaraciones de bastardos policias, intervenciones y carta de los compañeros de la CCF.
Viernes 3 de marzo.
Siguen declarando los maderos de Unidad Antiterrorista que estaban vigilando la casa de Haris Hadzimihelakis en septiembre de 2009. Ésta vez lo hacen G. Mourmoukoutas, el tercer policía que tomó parte en la observación y Hinopoulos, jefe del grupo. Mourmoukoutas no estuvo presente en la sesión anterior, dado sus “problemas psicológicos”. Recordamos que se trata del madero que hace algunas meses fue arrestado por un intento de atraco a un local de apuestas, algo que causó cierto escándalo mediático. Por esto es conveniente para las autoridades presentarlo ahora como “un policía bueno que desgraciadamente cayó en una grave depresión”. Por tanto, el madero en cuestión se mostró en el juicio bajo una visible influencia de algunos fuertes fármacos, calmantes y antidepresivos. Declarando, se metió en bastantes contradicciones, respecto a la más sencilla descripción de los hechos su versión fue diferente de la que sus propios colegas habían relatado durante la sesión anterior. No obstante él también, así como lo hicieron otros dos maderos-testigos, milagrosamente se “recordó” de haber visto al Damianos Bolano saliendo de la casa de Halandri, a pesar de que durante las interrogaciones previas no ha reconocido a nadie de los acusados.
El abogado de la defensa F. Ragousis presentó la solicitud de realizar un peritaje sobre “la condición mental y psicológica” del testigo. Sin embargo, esta demanda fue rechazada y el fiscal dijo que “el testigo declaró de manera muy clara y lo que dijo era lógico”. Además, evidente queriendo aprovecharse de la milagrosamente recuperada “memoria” del madero, el fiscal insistió mucho tiempo en preguntarle si podría reconocer al joven que al salir de casa de Haris y llevando casco de moto tiró unas bolsas en el basurero. La respuesta fue negativa.
Luego tomó la palabra Mihalis Nikolopoulos. Leyó partes de artículos de la prensa burguesa publicados después del arresto de Mourdoukoutas y concluyó diciendo entre otras: “Queda evidente que los sabuesos de la Unidad Antiterrorista tienen entre sus filas también psicópatas, que además admiten de serlo. Desde luego ustedes los están protegiendo, ya que han rechazado la solicitud de realizar un peritaje capaz de comprobar si aquel tipo tiene problemas psicológicos y mentales.”
A continuación habló Christos Tsakalos. Hizo algunas preguntas dirigidas al testigo y luego comentó: “No estamos haciendo esas preguntas para alegar a nuestra “presunción de inocencia”. Estamos orgullosos de ser miembros de la Conspiración de Células del Fuego y si hacemos preguntas a los testigos de acusación es solamente para que nuevos compañeros aprendan, para que tomen medidas de seguridad necesarias y sean cuidadosos en lo que hagan.”
Cuando el madero iba a retirarse todos los cuatro compañeros acusados… le echaron encima un montón de pastillas.
Después declaró el jefe del grupo de observación P. Hinopoulos. Mientras que durante su primera declaración realizada el 21 de septiembre de 2009, un día después de que empezó la observación de la casa de Haris y dos días antes de la operación antiterrorista, dijo claramente que todo que sabe lo sabe por sus tres subordinados. Muy raro considerando que ese mismo día ninguno de los tres maderos mencionados era capaz de reconocer a alguien, pero sólo un día después, el 22 de septiembre de 2009, Hinopoulos declaró haber reconocido personalmente a Damianos Bolano y a los dos hermanos Nikolopoulos. Ahora en el juicio Hinopoulos continuamente iba mencionando: “hemos utilizado informaciones que nos fueron entregadas de diferentes fuentes”.
El abogado de defensa solicitó de aplicar un parágrafo del Código del Procedimiento Penal que obliga al testigo a nombrar las personas de las cuales ha recibido las informaciones, porque si no su declaración quede invalida. Por tanto, el presidente del tribunal y el fiscal tuvieron que insistir en preguntarle. Hinopoulos dijo que las fuentes de sus informaciones eran los oficiales superiores de la Unidad Antiterrorista, D. Horianopoulos y G. Fragiskos.
El abogado Ragousis solicitó citar a los dos maderos esos de alto rango como testigos.
El juicio fue suspendido hasta el miércoles 21 de marzo.
Miércoles 21 de marzo.
La sesión empezó con la parte en que los acusados pueden hacer preguntas a los testigos de acusación. Sin embargo, antes de eso Mihalis Nikolopoulos hizo una declaración. Dijo, entre otras, que: “Obviamente aquí en este tribunal militar hay dos polos contrarios uno al otro, dos bandos enemigos. Uno es el vuestro, el del Poder y sus súbditos. (…) Según vuestro complejo autoritario nosotros somos los acusados, pero deben de saber que para nosotros lo son ustedes. Ustedes son acusados porque estan contra de la gente rebelde. Porque ustedes hacen todo lo posible para proteger a vuestros jefes. Porque ustedes mantienen y conservan los valores sociales de sumisión, consumismo, egotismo, miseria y aceptación. Porque siempre van a hacer lo que les mandan vuestros superiores. Porque ustedes, muy simplemente, eligieron su bando. Porque son enemigos de la revolución anarquista.(…) Tienen que saber, que además de ser unos acusados, ustedes son también unos culpables. Tienen que saber que vendrá el día en que nuestros consejos revolucionarios van a fijar vuestras condenas.”
A continuación Mihalis empezó a preguntar al madero P. Hinopoulos sobre quién, al fin y al cabo, pueda saber si la policía de hecho encontró los pisos francos de la CCF o no. Hinopoulos dijo que no lo sabe y comentó que los encargados de todo aquel “proyecto anti-CCF” de la Unidad Antiterrorista eran los oficiales D. Horianopoulos y G. Fragiskos. Acabando, Mihalis dijo que se alegra de escuchar que los pisos francos de la Conspiración no fueron descubiertos y añadió que una vez más queda claro como justificada era la solicitud de la defensa de citar a esos dos oficiales.
Luego, con sus propias preguntas a Hinopoulos siguió Christos Tsakalos. A la pregunta si las informaciones reunidas por la Unidad Antiterrorista provenían de las escuchas telefónicas (tal noticia apareció ciertas veces en la prensa), el policía respondió que no. Christos preguntó también como es posible que Hinopoulos, después de pasar delante de la casa de Haris muy pocas veces y por sólo un breve momento, era capaz de ver que “dentro hubo unas 20 personas”. A ésta y las siguientes preguntas Hinopoulos respondió de manera muy confusa, frecuentemente se iba contradiciendo a sí mismo.
Lxs abogadxs de defensa H. Sipsas y I. Karandrea comentaron que las declaraciones de Hinopoulos se muestran totalmente alejadas de todo lo que dijeron antes sus tres subordinados. Lxs abogadxs apoyaron también por su parte la solicitud presentada en la audiencia anterior por F. Ragousis, la de citar a los dos oficiales de alto rango encargados de la “operación Halandri”.
Luego, Christos Tsakalos leyó artículos de la prensa burguesa de aquel periodo (septiembre de 2009), los cuales revelaron que el alto oficial de la Unidad Antiterrorista tuvo una reunión con el primer ministro de entonces, Kostas Karamanlis, en que juntos decidieron de presentar, justo en éste período (siendo pre-electoral), la casa de Halandri como “el piso franco de la CCF”. De esta manera el gobierno de Nea Dimokratia esperaba de recibir elogios por su “exitosa lucha contra el terrorismo” y subir su porcentaje de votos.
A continuación empezaron a declarar 5 testigxs presenciales (entre ellxs un policía) del ataque de la CCF contra la vivienda del P. Hinofotis, entonces el ministro de interior. Tanto el presidente del tribunal como el fiscal con gran entusiasmo y ansia intentaron sacarles cualquier tipo de información y persuadir-los de “reconocer” a algún acusado. Eso no pudo pasar sin contradicciones, por ejemplo el policía que vigilaba la casa del ministro, insistía en haber visto a “un joven de pelo largo, de edad 25-30 años, que sacaba fotos de la casa”, mientras que el sospechoso en cuestión apareció ser un hombre de 48 (entonces) años, que además… estaba a su lado, siendo también él un testigo presencial. Sin comentar dejemos el hecho que aquel hombre es calvo… Para no dejar que el madero-testigo quedará ridiculizado todavía más, el presidente del tribunal no ha seguido examinando a dos otros testigos presenciales.
Antes que empezaron a declarar lxs 5 testigxs presenciales, Christos Tsakalos, en nombre de toda la organización leyó una declaración. La presentamos completa:
“TENEMOS TODAVÍA ARMAS Y EXPLOSIVOS…
PERO LAS EXPLOSIONES MÁS BELLAS OCURREN EN NUESTRO INTERIOR.Ya que vuestro tribunal militar continuará ahora con las declaraciones de testigos presenciales relacionados con tres ataques de la Conspiración de Células del Fuego, quisiéramos dejar claras algunas cosas.
Frecuentemente, tanto el presidente del tribunal como el fiscal, están preguntando sobre la potencia de los artefactos explosivos. Preguntan si eran de pequeña o gran potencia, si hubo el peligro para vida humana o no.
Nuestra posición como Conspiración es bien concreta.
No tenemos ningún respeto a la vida humana así de simple y en general. La vida humana por sí misma no constituye algún ideal o algún valor supremo. La vida crea la posibilidad de elegir opciones. Las opciones que tomamos son lo que tiene valor y define a nuestra vida. Evidentemente las opciones hechas por un dignatario del Poder, un juez o un carcelero no sólo carecen de cualquier valor para nosotros, pero además son enemigas hacia nuestra percepción y dignidad. Se trata de unas personas que su existencia en sí ofende a nuestro sentido estético y a nuestro deseo por una vida libre e anárquica.
Es ineludible, por tanto, el hecho que con tales personas estamos en guerra. Como se sabe en guerra hay muertes. Por esto, en nuestros comunicados y textos repetidamente apoyamos y apasionadamente promulgamos la práctica guerrillera de ejecución política.
Una persona libre no es aquella que recibe su libertad regalada tras ilusiones de democracia, sino aquella que toma armas y lucha para conquistarlo.
Por otro lado, como ya lo hemos dicho, los ataques realizados por la nueva guerrilla urbana anarquista son siempre bien concretas y apuntadas.
Apuntan al corazón del enemigo, ahí donde triunfa el Poder y donde habitan sus representantes. A los bancos, los ministerios, los juzgados, las comisarías.
Por esto cada uno de los ataques de la Conspiración de Células del Fuego fue realizado en una manera que evitara, aunque sea la más pequeña, lesión de alguna persona accidental o de algún transeunte. Esto habitualmente fue logrado tras dos llamadas de aviso a los medios de comunicación de masas, para que la policía evacue la zona.
Lo mismo ocurrió también en los casos de vivienda de Hinofotis, del Ministerio de Macedonia y Tracia y de la casa de Katseli, por los cuales estamos juzgados aquí en el tribunal militar de Koridallos.
Ahora, en lo que se refiere a la potencia de los artefactos explosivos, lo que tenemos para decir es que el potencial de un acto guerrillero no puede ser medido según los kilogramos del material explosivo utilizado o casquillos que deja detrás un ataque armado.
Durante los años de su actividad la Conspiración había golpeado utilizando desde improvisados artefactos incendiarios hasta fuertes explosivos y armas. La elección de los medios resulta de la estrategia de difundir la nueva guerrilla urbana, la anarquía y el nihilismo.
Según el ataque que queremos llevar a cabo elegimos de nuestros arsenales medios adecuados. Cerillas, gasolina, pólvora, TNT, balas.
Por esto cualquier pregunta respecto a la potencia de artefactos explosivos que estamos utilizando la consideramos de sobra y por lo tanto no la vamos a responder. No vamos a regatear las condenas que os ordenaron de imponernos, tampoco vamos a mendigar por las circunstancias atenuantes de vuestras leyes.
Si quieren una respuesta os la daremos por adelantado y una vez por todas. Independientemente de la potencia de artefactos explosivos que utilizamos, la intención de Conspiración de Células del Fuego es dinamitar los fundamentos de vuestro sistema podrido por completo.
Solamente así quedará derogada la historia de esclavos y jefes.
Y para que esto ocurra las balas y los explosivos por sí solas no son suficiente, lo que cuenta de verdad es que cada uno y cada una tome su vida en sus propias manos, cree en sí mismo y en sí misma y encuentra en sí la fuerza de apuntar tu arma a los asesinos de tu vida.
“La fuerza está en nuestros ojos,
luminosa y grande como dos llamas en medio de la noche.
En cada lugar de la tierra
A cada hora
En cada cárcel
Ahí donde las personas luchan, mueren y quedan encarceladas
porque se atreven por lo que es intangible, por lo que es libre
por una vida nueva, por la anarquía…”CCF/FAI, Célula de Miembros Encarcelados.
Después de examinar el madero-testigo ocurrió un pequeño incidente en el público. El jefe de los guardias ordenó registrar a la compañera de Damianos y su bolso. Lxs solidarixs y lxs familiares no lo permitieron y todxs abandonaron la sala, mientras que lxs abogadxs de defensa protestaron también. Los cuatro acusados dijeron que si la policía intentaba registrar a lxs solidarixs, ellos van a salir también.
Para calmar los ánimos el juicio quedo suspendido hasta lunes, 26 de marzo.