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Si bien desconocemos las causas del incendio, que se puede haber iniciado de forma natural, no podemos esconder nuestra alegria por la destrucción de las maquinas aereas y el galpon, más cuando son de propiedad de la autoridad. Asi también nos alegramos de cuando murio Pinochet y despues cuando murio en un accidente aereo el director de carabineros Jose Bernales. Ambos muertos por cuasas ajenas a la guerra pero motivos claros de alegria.
Un helicóptero institucional, otro civil y las dependencias de la Sección Aeropolicial y del Grupo de Operaciones Policiales Especiales (GOPE) resultaron quemados tras desatarse un incendio, a las 15:10 horas de ayer, en el hangar de Carabineros ubicado en el aeródromo Teniente Vidal de Coihaique, Región de Aisén.
Las causas del siniestro no están claras y son investigadas por peritos del Laboratorio de Criminalística de Carabineros (Labocar) y de Bomberos de la ciudad, por orden del fiscal militar, mayor Rodrigo Cuadra.
Las llamas se propagaron rápidamente, por lo que fue imposible salvar las aeronaves, que resultaron con pérdidas totales.
El helicóptero institucional, modelo BO-105 del año 1986, estaba avaluado en US$ 700 mil y había llegado hace unos meses a la región desde Temuco. La zona llevaba dos años sin una unidad de este tipo, luego de que la anterior fuera destruida en un accidente. El helicóptero civil, era de la empresa Ecocopter.
El fuego se propagó también a las oficinas del GOPE colindantes al hangar, donde las llamas destruyeron equipos especializados, como material de rescate y un bote zodiac.
El combate del incendio se complicó, debido a que explotaron balas de armas, tambores con combustible y los propios helicópteros, cuyas partes quedaron esparcidas varios metros a la redonda. Esto obligó a Carabineros a establecer un amplio perímetro de seguridad.
700 mil dólares, es el avalúo del helicóptero de Carabineros destruido por las llamas.
